Aquí van algunos consejos prácticos para el que visite Estocolmo. Creo que pueden ser de gran utilidad.
Primero que nada algunas cosas en lo que refiere a transporte. Los bonos y tarjetas mensuales para viajar en la locomoción colectiva se adquieren por lo general en los negocios llamados Pressbyran. Comúnmente estos siempre se encuentran localizados cerca de las estaciones de metro y trenes.
Aunque a veces algunas casetas de billetes en las mismas estaciones vendan bonos, esto no es para nada común, menos aún cuando se trata de tarjetas mensuales. La función de las casetas de billetes y la del mismo inspector es la de timbrar los bonos, informar y vigilar las estaciones. Asimismo, en los buses tampoco se venden bonos ni tarjetas mensuales. En conclusión, toda adquisición de bonos y tarjetas para viajar en la locomoción colectiva se debe hacer en los llamados Pressbyran.
Otro consejo es el averiguar los buses que por las noches llevan a casa. Tanto el metro como los trenes dejan de pasar ya a cierta hora (generalmente entre las 24.30 y 01.00 los días de semana). Sin embargo, la red de buses cubre de forma efectiva casi toda la capital y sustituye, por las noches y madrugada, los recorridos del metro y trenes a los suburbios.
Viajar en taxi es carísimo y vale la pena consultar antes el precio hacia el destino deseado. Hay distintas compañías (se distinguen por los números de teléfono que llevan marcados en sus coches) con tarifas que pueden variar bastante de una a otra.
Cabe decir también que, a menudo, a la salida de los locales nocturnos se llena de personas ofreciendo servicios de taxi, estos son los llamados “taxis al negro” svart- taxi. Se debe estar conciente de que estos coches circulan sin autorización de taxi y que al abordarlos tampoco se está exento de los peligros que corre cualquier persona al subirse a coches de desconocidos y sin ningún control. Además, a pesar de que estos coches “taxi” se perfilan como más baratos que taxis legales, no siempre es así.
Ya que entramos en lo que es vida nocturna de Estocolmo vale repetir que esta comienza bastante temprano, tipo siete de la tarde ya es buena hora para salir de marcha. La mayoría de la gente sale, sin embargo, cerca de las nueve o diez de la noche, aunque gran parte de los locales cierran cerca de las una de la mañana. En general, la vida nocturna es corta, pero intensa. No es extraño tampoco que para los locales nocturnos haya que hacer cola para entrar.
En lo que respecta a bebidas alcohólicas, estas solo son vendidas en tiendas especiales, los llamados Systembolaget. Estos no son tan numerosos, pero cada comuna del centro de Estocolmo posee por lo menos uno. La edad que se debe tener para poder comprar aquí es de 21 años, y a menudo el cajero les pregunta a los jóvenes por su carné de identificación.
Las cervezas con bajos grados de alcohol se pueden comprar en supermercados. La edad límite para poder comprar de esta cerveza es de 18 años. Lo mismo vale para comprar tabaco.
Un consejo que tener en cuenta al pasear por Estocolmo es que la gente es muy organizada. Por ejemplo, al usar las escaleras eléctricas se debe saber que el costado izquierdo de la escalera se le deja a la gente con prisa, y que sube las escaleras a pie. Los que no tengan prisa ni intención de subir a pie deben colocarse al costado derecho de la escalera automática para dejar pasar a los estresados. Esto, aunque parezca un detalle es muy importante, de lo contrario existe el riesgo de ser expuesto a quejas e incluso insultos.
En lo que respecta a idiomas el inglés es hablado de forma fluida por gran parte de la población. El español goza de gran popularidad, por lo que no es extraño que gente lo hable bien. La gente más joven es la que más domina otros idiomas y se debe tener en cuenta que la gente mayor no siempre se desenvuelve tan bien como los jóvenes en ingles.
Volviendo a lo de los horarios, no es tan sólo la vida nocturna que comienza temprano. La rutina diaria en general tiene un horario más tempranero que el continental. Esto tiene mucho que ver con las poquísimas horas de sol que hay gran parte del año. En pleno invierno el sol no sale antes de las 8.30 de la mañana y se esconde ya cerca de las dos de la tarde. Esto, sin embargo, se compensa con los interminables atardeceres de verano que duran, en plena época veraniega, hasta casi la medianoche. La época laboral, sin embargo, está planificada para la época más oscura del año, por lo que los obreros comienzan su día de trabajo ya entre las 5 y 7 de la mañana, mientras empleados y oficinistas lo hacen entre 8 y 9.
El almuerzo (lunch) es entre las 11 y 13 del día. A las dos de la tarde, más o menos, se toma café con bocatas (a esta merienda se le llama mellanmol) y entre las cinco y siete de la tarde se cena (middag).
Entre España y Suecia no existen diferencias de hora.